Yo llamaria a esta historia "no estrenes tacones en Giron", todo comenzo cuando decidi ir a visitar a mi prima de Bucaramanga, y claro a mi se me viene a la cabeza "zapatos", cada vez que pensaba en bucaramanga, asi que con mi pregunta ingenua de si en verdad esta ciudad era la cuna de los zapatos, me han llevado a San Francisco que es como una ciudad entera de zapaterias!!, claro que con los encargos que me habia hecho criti me la pase todo un dia tomando fotos de sandalias y enviandoselas por black berry, pero alli no empieza mi historia, empieza en que yo Carolina, eternamente devota de los zapatos bajitos y comodos, me fui a comprar unos tacones en plataforma gris con bolitas blancas y para colmo me los estreno justo el dia que voy a concoer Giron!!
Ahora si, dejenme contarles que Giron es un hermoso municipio colonial, con sus calles originales en piedra, piedra!! y yo en tacones!!
Pero mas bien no los aburro contandoles sobre mis pies adoloridos, dejenme decirles que llegar a giron es una experiencia sorpresiva, yo solo se que ibamos en el auto por bucaramanga cuando de repente ya estabamos en giron, no se en que momento cambiamos de municipio, pero si se que hacia un calor impactante.
Cuando llegue no me parecia nada fuera de lo comun, se me parecio un poco a Cartago - Valle, casas normales, calles normales, entonces nos dispusimos a caminar, llegamos a un puentecito lleno de puestos de dulces y de repente senti que habia retrocedido 100 años ( o mas) en el tiempo, bueno, es un decir por que la verdad habian carros y motos por todos lados, pero excluyendo esto, la vista eran callecitas todas en piedra, las casas de bareque pintadas de blanco impecable, con puertas y ventanas de madera pintadas de marron oscuro, todos los letreros comerciales en marmol y un cielo azuloso que le sentaba muy bien al paisaje.
Asi llegamos a Giron.
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